En el día de hoy, ha fallecido en Barcelona el comunicador de las ondas, de La Vega de San Mateo, nuestro compañero y amigo Ramón Mariscal i Parella.
Desde aquí le damos a su esposa Maria e hija Erika y nieto, a su hermano, amigos y demás familia nuestro más sentido pésame en estos momentos de dolor.
Ramón Mariscal i Parella, escritor, poeta y comunicador, llegó a la Vega de San Mateo allá por el año 2008 procedente de Cataluña, su tierra natal. Fue precisamente en La Vega de San Mateo donde intentó conseguir realizar un programa de radio llamado"El Pati" que emitía en tierras catalanas antes de desembarcar en las nuestras. Su primer paso lo dio en Radio Tinamar, pero no resultó. En su búsqueda tropezó con otra emisora, que si bien no era muy oída en el pueblo estaba ahí como una opción más, fue Radio San Mateo la "radio sencilla" la de Mila y Javier.
Fue esa etapa la más brillante que tuvo jamás radio San Mateo, "la radio sencilla", ya que el programa "El Pati", el patio, se transformó en el "Patio Canario" que catapultó a la sencilla radio del pueblo a lugares jamás soñados y a una audiencia fiel y amplia..
Era el Patio Canario un programa sociocultural que entretenía a jóvenes y mayores. Radio San Mateo comenzó así una andadura de gloria de la mano de este fabuloso comunicador que llevó, gracias a su radiofónica voz, su temple y su saber estar a los puntos más altos de audiencia en las medianías de Gran Canaria, desde esa famosa vuelta de Antona, la de los 1.000 metros, como solía decir Francisco Pulido Trejo.
Esto motivó que Ramón se inquietara por otra faceta que no estaba incluida en su programa, la política en toda su extensión. Así, un año después, y en horario de media mañana, la dirección de la radio dio el visto bueno para que la política se añadiera a "El Patio Canario". Si la parte sociocultural fue un éxito, la franja horaria de la polÍtica se convirtió en poco tiempo en el programa favorito de todos los vegueros y vegueras, en un referente histórico jamás visto en las medianías de Gran Canaria, incorporando a sus programas, como un tertuliano fijo, a Jesús Padilla, administrador de esta página. Entre ambos lograron establecer una programación seria, concienzuda y llena de contenido. Abogados, médicos, representantes de casi todos los partidos políticos de la isla, deportistas, ciudadanos de a pie, agricultores, etc., todos tenían cabida en "El Patio Canario".
Tras ese periplo de gloria Ramón Mariscal tiene que salir por la puerta de atrás, no sin antes dejar un sabor de boca que aún hoy sigue en el ambiente radiofónico ya que cuando su programa comenzaba no había bar, restaurante, casa o empresas que no colocaran el dial de la radio sencilla para escuchar la política del hombre que supo entrar a través de las ondas en la casa de todos los vegueros y vegueras.
Su marcha le llevó a Canariasahora radio dirigida por el periodista Carlos Sosa, sita en la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria. Allí su programa tuvo una gran acogida. Tras ese periplo fue llamado a formar parte de otro programa sociocultural en el municipio de Valsequillo, en Radio Valsequillo, la radio municipal, donde puso en marcha "La Cafetería". Más tarde, y por cuestiones familiares, Ramón Mariscal regresa a su tierra natal donde nunca perdió el contacto con sus amigos y con esta tierra canaria a la que consideraba también suya, un canario/catalán como bien decía.
De entre sus libros destaca "EN LAS RAMAS", una crítica a la sociedad actual. Habla de una secta de la cual relata todos los hechos que sirven de metáfora en esos momentos en que se ve atrapado por ella. Relata la vivencia la cual describe, a través de la misma, y que le servirá para analizar otros problemas que surgen en las vidas de otras tantas familias atrapadas por sectas diferentes.
Sus poemas fueron otra de las fuentes de inspiración de Ramón Mariscal. Escritor empedernido le gustaba jugar con las palabras y encuadrar en cada renglón lo que necesitaba transmitir. Cada poema suyo tiene un significado profundo, un toque especial que le daba genialidad y una sobriedad que endulzaba a quién los leía, forzándole agradablemente a una lectura serena y llena de pensamientos.
Aquí les dejamos con unos fragmentos de un poema que hizo para un hombre de esta tierra, Desiderio Padilla, el hombre del tiempo. Ahora en este día en que Ramón parte hacia un destino desconocido queremos dedicárselo porque de su pluma salió.
Desde www.lavegadesanmateo.com, la página más veterana de esta Vega de San Mateo, la página de la libertad y de la cultura no forzada, queremos darle las gracias al hombre de pluma fácil y expresiones cervantinas, por esos artículos que llenaron espacio en las ondas y en las redes sociales.
Su rica hemeroteca llenan todo el espacio de esta página, Ramón Mariscal i Parella nos ofreció cultura y amistad infinita. Descansa en paz amigo, descansa en paz compañero, gracias por transmitirnos la libertad y amar la democracia, a ser honestos de corazón y sobre todo enseñarnos a escuchar todo y no simplemente oír.
Sus personajes entrañables se encontraban en esta vega, a la que quería tanto como a su tierra natal.
Con Pepita y Moma, las almas caritativas del pueblo |
Alejandro Peñate y Ramón |
Con Fermín Navarro "El Luchador" |
Con paco el de "La Farmacia" |
Con Miguel "El Herrero" |
UN HOMBRE QUE MIRABA AL CIELO
Se nos fue,
Se marchó,
Amigo de pintores de letras,
De los que dibujan nuestras inquietudes
Nuestras esperanzas,
Nuestras flaquezas,
Nuestras ansias,
Nuestras riquezas,
Nuestras miserias,
De esas y muchas más tú RAMÓN las vivieras.
No está bien que al que se va
Se le llenen de halagos
Sin que inserviblemente pueda escucharlos
No está bien que el mundo se acuerde
Tan solo de aquellos que se van cuando
Se sabe que no volverán.
La vida es un soplo,
Como entra sale,
Como viene se va,
Pero queda en la humanidad
Su recuerdo perenne
Su personalidad
Y nadie puede negar
Su libro no está vacío
Sus páginas no están en blanco,
Desde el principio hasta el final.
La vida siempre es vida
No hay muerte
Pues no hay olvido y el olvido
Es la muerte para aquellos
Que son vivos sin haber hecho nada consecuente.
*Extracto adaptado del poema "Un hombre que miraba al cielo" de Ramón Mariscal i Parella a Desiderio Padilla, el "Hombre del Tiempo" con motivo de su fallecimiento.
VEGUEROS S.M.